Instalación perfecta

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Para que una mosquitera funcione correctamente y se vea bien estéticamente, es decir, con una red bien estirada, la caja y la manilla deben estar perfectamente paralelas, mientras que la caja y las guías deben estar perpendiculares entre sí con un ángulo de 90°. Esta operación se realiza simplemente sujetando la caja con una mano e insertándolo bajo las guías correspondientes. En este punto, la caja se colocará sobre las guías de manera que quede paralela a la superficie de apoyo. Gracias a este sencillo truco, en el caso de que el compartimento sea irregular y fuera de escuadra, cualquier grieta resultante del montaje de la mosquitera será visible en la parte superior y podrá cubrirse fácilmente con productos especiales (silicona, juntas, cepillos, etc. .) disponible en cualquier ferretería.